Pido perdón.

Pedir perdón es difícil, pero necesario. En este caso, es totalmente necesario.
En unas horas va a ser 20 de mayo. Domingo veinte de mayo de 2012. A vos, Luchi, que te quiero tanto, te quiero pedir perdón por ser tan tonta, por haber desaparecido y haber cortado toda comunicación. Te quiero agradecer por, a pesar de que no te hable, me saludes en los pasillos cada vez que nos vemos. Esas pocas veces son las que me llenan de felicidad. Y de culpa. Felicidad, porque siento que un amigo siempre estuvo ahí, y lo tengo cerca. Y culpa, porque por tonta, boba, estúpida, no aprovecho eso.

Este año egresás, te vas del cole y empezas esa vida universitaria. Me queda medio año para verte por los pasillos del cole y saludarte como siempre. Que tarada por no aprovechar. Me decís por qué soy así?  Espero, con todo mi corazón, que me perdones por haberte abandonado, y más en estas situaciones duras que tuviste que pasar y que no estuve ahí para vos. Eso no hacen las amigas, perdón. Entiendo que la amistad se haya gastado y hayamos dejado de hablar. Pero no te quiero perder, y quiero volver a retomarte como mejor amigo, porque eso fuiste y eso sos desde que tengo memoria y usamos pañales.

Te debo el book, si es que querés perdonarme y todavía queres hacerlo.

Adjunto una foto de esos grandes momentos que vivimos, me hacen sonreir.

Estoy viendo las conversaciones en facebook que teníamos. Las extraño. Y las quiero de vuelta. Por favor. Voy a aprovechar toda oportunidad que tenga, porque no te quiero perder. En serio te quiero en mi vida, y te repito por octava vez, perdón.

Feliz cumpleaños amigo hermoso, te quiero con mi alma.

Flor.